Tú decías que nunca llegaremos a tiempo
...y cuanto más aguantemos la respiración, cuanto más tiempo callemos, más maduros pareceremos, mejor hablarán las crónicas de nosotros: qué temple, qué saber estar... Pero no lo hacemos por eso, lo hacemos mitad por miedo, mitad porque aún no estamos del todo convencidos. Y tienes razón: después quizás sea tarde.
0 Comments:
Post a Comment
<< Home