life vest under your seat

"...te dije que nunca resistí las despedidas, al aeropuerto no."

Thursday, May 04, 2006

Basta con que tú no quieras, para que se enamoren de ti..

A ver: Resulta que yo paso tres kilos de jugar en la NBA. De hecho, hace poco que he aceptado una oferta de las que se me dan bien: aprender poco, emborracharme mucho y echarte de menos al por mayor. Pero he aquí, que hoy recibo una llamada de un ojeador que me pide que me reúna con él mañana, que tiene una oferta irrechazable que hacerme.
Irrechazable... la única oferta que no rechazaría sería la que me asegurase olvidarte..

7 Comments:

Blogger Gacela said...

Pero es que se pueden construir futuros sin necesidad de olvidar el pasado, sólo... dejándolo en su espacio, parte de ti que está ahí sin condicionar los manyanas.

Espero, al menos.

(Y hasta aquí hemos llegado, ninyo hiperproductivo. Buenas noches, dulces suenyos)

2:40 AM  
Anonymous Anonymous said...

pero cuesta hacer eso......es más, se puede hacerunaterceravez? pregunto..

11:01 AM  
Blogger jornalerodelagloria said...

"... dejándolo en su espacio, parte de ti que está ahí sin condicionar los manyanas." ¿Acaso no es esa una definición de olvido?

6:14 PM  
Blogger Gacela said...

No. Una cosa es que no condicione el futuro, y otra negar el pasado. Olvidar es negación. O vamos, esa es mi interpretación. Y un recuerdo (sano) acompanya sin condicionar.

6:52 PM  
Blogger jornalerodelagloria said...

Olvidar es negación...umm... sin duda. Ahora bien, una manera de que el recuerdo no condicione tu futuro es "rebajarlo con agua", negarlo un poco oficialmente para que se quede ahí, en su sitio, como parte de un pasado que te hace mejor (en esto estoy contigo), pero pasado al fin y al cabo.
Sucede que los recuerdos son revoltosos, y no se están quietos, y a veces saltan a tu presente y producen ojeras: eres tú quien los doma (negándolos un poquito, es mi truco) y los conviertes en sanos, dóciles. Sin edulcorarlos un poco, arañan.

PD:...y ya sin que tenga nada que ver con el comment: "El imposible olvido" es un libro de A.Gala. No lo he leído, pero me fascina el título.

8:36 PM  
Blogger Gacela said...

Es verdad, si yo también los domo. Pero los domo edulcorándolos más que negándolos. Que al final sólo son distintas técnicas de hacernos más fácil el camino, supongo :-)

7:31 PM  
Anonymous Anonymous said...

No se olvida, se aprende, se evoluciona.

1:10 PM  

Post a Comment

<< Home