Cerrar
Como un pop-up aparecías cada dos por tres con tu matraca de lo felices que podríamos ser si te dejara, pero mi respuesta a tu insistencia era la misma: X. Porque por aquel entonces yo no era un tipo duro, pero mucho menos era gilipollas.
"...te dije que nunca resistí las despedidas, al aeropuerto no."
0 Comments:
Post a Comment
<< Home