Serie "Conversaciones con tu recuerdo"

Tú leías mierdas de Coelho en las que dos ranas se ahogaban en un cuenco de leche y una de ellas se dejaba ahogar y la otra, sin embargo, pataleó y pataleó hasta convertir la leche en nata o mantequilla o qué sé yo y consiguió salvarse. Yo te escuchaba explicarme la alegoría mientras pensaba en la obviedad de que no es lo mismo estar ahogándose que haberse ahogado. Ay, la paz de los ahogados... También pensaba en la de hostias que te iba a dar la vida, pero bueno, eras joven todavía.