Lucía y la honestidad brutal
Lucía ojea por casualidad el libreto del cedé de Calamaro. Entonces lee "la honestidad no es una virtud, es una obligación". Ahí se da, definitivamente, cuenta. Va a buscar a Daniel. Tengo que decirte algo, dice.
"...te dije que nunca resistí las despedidas, al aeropuerto no."
0 Comments:
Post a Comment
<< Home