Lucía: Ni yo bordo pañuelos, ni tu rompes contratos.
Daniel: Ni yo mato por celos, ni tú mueres por mí,
Lucía: y antes de que me quieras como se quiere a un gato, me marcho con cualquiera que se parezca a ti.
Daniel: De par en par te abro las puertas que me cierras.
Lucía: Me cuentan que el olvido no te sienta tan mal.
Daniel: La paz que has elegido es peor que mi guerra,
Lucía: lo que pudo haber sido, lo que nunca será...
Lucía: Quien hará tu trabajo, debajo de mi falda,
Daniel: la boca que era mía de qué boca será.
Lucía: El roto de tu ombligo ya no me da la espalda cuando pierdo contigo las ganas de ganar.
Daniel: Como pago al contado, nunca me falta un beso.
Lucía: Siempre que me confieso me doy la absolución. Ya no cierro los bares, ni hago tantos excesos.
Daniel: Cada vez son más tristes las canciones de amor.
Lucía: Aunque nunca me callo, guardo un par de secretos...